Salte la navegación

Monthly Archives: agosto 2009

 

I

¡Pues bien! yo necesito
decirte que te adoro
decirte que te quiero
con todo el corazón;
que es mucho lo que sufro,
que es mucho lo que lloro,
que ya no puedo tanto
al grito que te imploro,
te imploro y te hablo en nombre
de mi última ilusión.

II

Yo quiero que tu sepas
que ya hace muchos días
estoy enfermo y pálido
de tanto no dormir;
que ya se han muerto todas
las esperanzas mías,
que están mis noches negras,
tan negras y sombrías,
que ya no sé ni dónde
se alzaba el porvenir.

III

De noche, cuando pongo
mis sienes en la almohada
y hacia otro mundo quiero
mi espíritu volver,
camino mucho, mucho,
y al fin de la jornada
las formas de mi madre
se pierden en la nada
y tú de nuevo vuelves
en mi alma a aparecer.

IV

Comprendo que tus besos
jamás han de ser míos,
comprendo que en tus ojos
no me he de ver jamás,
y te amo y en mis locos
y ardientes desvaríos
bendigo tus desdenes,
adoro tus desvíos,
y en vez de amarte menos
te quiero mucho más.

V

A veces pienso en darte
mi eterna despedida,
borrarte en mis recuerdos
y hundirte en mi pasión
mas si es en vano todo
y el alma no te olvida,
¿Qué quieres tú que yo haga,
pedazo de mi vida?
¿Qué quieres tu que yo haga
con este corazón?

VI

Y luego que ya estaba
concluído tu santuario,
tu lámpara encendida,
tu velo en el altar;
el sol de la mañana
detrás del campanario,
chispeando las antorchas,
humeando el incensario,
y abierta alla a lo lejos
la puerta del hogar…

VII

¡Qué hermoso hubiera sido
vivir bajo aquel techo,
los dos unidos siempre
y amándonos los dos;
tú siempre enamorada,
yo siempre satisfecho,
los dos una sola alma,
los dos un solo pecho,
y en medio de nosotros
mi madre como un Dios!

VIII

¡Figúrate qué hermosas
las horas de esa vida!
¡Qué dulce y bello el viaje
por una tierra así!
Y yo soñaba en eso,
mi santa prometida;
y al delirar en ello
con alma estremecida,
pensaba yo en ser bueno
por tí, no mas por ti.

IX

¡Bien sabe Dios que ese era
mi mas hermoso sueño,
mi afán y mi esperanza,
mi dicha y mi placer;
bien sabe Dios que en nada
cifraba yo mi empeño,
sino en amarte mucho
bajo el hogar risueño
que me envolvió en sus besos
cuando me vio nacer!

X

Esa era mi esperanza…
mas ya que a sus fulgores
se opone el hondo abismo
que existe entre los dos,
¡Adiós por la vez última,
amor de mis amores;
la luz de mis tinieblas,
la esencia de mis flores;
mi lira de poeta,
mi juventud, adiós!

Manuel Acuña

Vamos a odiarnos…tal vez para nunca olvidar aquel recuerdo hermoso
Vamos a odiarnos… tal vez para disimular nuestras penas
Vamos a odiarnos… tal vez para esconder nuestras lágrimas
 
Pero porfavor, prometamos nunca amarnos
Porque al amarte, olvido aquel hermoso recuerdo
Porque al amarte, no disimulo mis penas
pero sobre todo, porque al amarte, mis lágrimas dejan expuesto a un ser débil e indefenso…
 
¿El odiar es algo malo?
dime tu, porfavor, oh protagonista de mis más grandes ilusiones
si al odiarte permito que exista aunque sea el recuerdo
o si al amarte desvanezco toda ilusión…
 
Porfavor…
Y yo… sigo pensando…
Es cierto que uno nunca sabe lo que tiene hasta que lo pierde…
y ahora yo me encuentro en esa situación…
No sabes cuanto sufro porque tu no estás cerca…
te añoro con toda mi alma, 
la misma que llora cada vez que recuerdo tu cara,
 tus ojos, tu piel…
¿Por qué debe de ser tan doloroso?…
 ¿por qué hasta ahora me doy cuenta de lo que significabas para mí?
Es difícil de explicar esto ¿sabes?
Quisiera saber qué es lo que has estado haciendo,
 si aún piensas en mí,
 y si por alguna razón piensas igual que yo.
¿cuando volverás?
Te necesito, quiero escuchar al menos una vez más aquella voz que me hacía pensar aunque sea por unos instantes que no estaba solo.
Quiero gozar de tu compañía, la más sincera y pura que haya vivido…aunque sea un momemto más…porfavor.
Aún espero… aquel encuentro fortuito…
Para ti, donde quiera que estés… te extraño…y te amo a más no poder…