Tales of the origin

Capítulo II

La vida en Ramadash

Al salir de su casa, Drklms echó a correr mientras llevaba un trozo de pan tostado en la boca, pues no le dió tiempo de tomar sus alimentos.

<<Ojalá llegue a tiempo>> se decía a sí mismo mientras corría sobre el sendero y sostenía con una mano el sombrero que posaba sobre su cabello largo y rojo.

De repente, al correr sobre un callejón, tropezó con una persona quien al toparse con él, cayó de la bicicleta en la que se encontraba.

-Ouch-Decía Drklms con un gesto de dolor mientras se incorporaba -¿Estás bien?-Preguntó al sujeto que aún se encontraba tendido en el piso mientras le brindaba una mano para que se pusiera en pie-

-¡Jeje, qué tonto!-decía la persona mientras tomaba la mano de Drklms-Gracias, estoy bien- en ese instante las miradas de los dos se cruzaron-

¿Cómo te llamas?-preguntó Drklms al aún extraño, quien mostraba tener una apariencia joven pues tenía la tez blanca y clara de estatura media y de cabellos negros que le llegaban a la altura de los hombros-

-Me llamo Kohaku-Respondió mientras le tendía una mano-¡Mucho gusto!

-Nahh, si-decía Drklms pretendiendo no notar la mano de Kohaku-

-y tú, ¿Cómo te llamas?-le preguntaba mientras reincorporaba su mano en la parte lateral de su cuerpo-

-me llamo Drklms…-en cuanto dijo esto se creó un silencio absoluto, y poco tiempo después volvió a decir- al parecer asistes al mismo instituto que yo-.

-¿Cómo lo sabes?-preguntó Kohaku un poco extrañado-

-Tu uniforme, es del instituto Vanguard-respondió Drklms con expresión sarcástica-, por cierto, debemos irnos, o no llegarás a la primera clase- una vez dicho esto, se dirigieron hacia el sendero delante de ellos-

Y echaron a correr de nueva cuenta, pero esta vez, seguido de Kohaku quien se encontraba en su bicicleta-

Después de que Drklms y Kohaku corrieran y pedalearan un buen tramo, llegaron a la entrada de un edificio que a primera instancia les resultaba enorme.

*huff* llegamos al fin-decía Drklms  a Kohaku, quien no mostraba signos de agotamiento-

-mmm…con que esta es la famosa Academia Vanguard.

-¿¡No la conocías!?-preguntó con un poco de asombro

-No, pero me gustaría que en alguna ocasión me mostraras los alrededores, así, además de conocer la escuela, tal vez podamos ser amigos-.

-Mmm…, no te voy a decir que no pero luego no acepto reclamos

-¿Por qué lo dices?

-Por lo general la gente se intimida al verme, espero no sea lo mismo contigo-.

-No hay problema-respondió Kohaku con cierto interés reflejado en su rostro-

-Sólo que hoy no podré, tengo un compromiso muy importante y me tomará la mayor parte del día-

-No quiero sonar entrometido, pero ¿Se puede saber qué es? -preguntó ansioso Kohaku-

-No le veo ningún problema; pues verás, hoy recibo mi insignia Vanguard-.

-Ahhh, así que ya te graduaste…, dime, en qué te graduaste-.

-Pertenezco al grupo de aprendices de artes ofensivas del primer batallón del ejército Vanguard; con la insignia seré parte del batallón.

-He oído que los ejecutantes de artes ofensivas de Vanguard son buenos-aseguró Kohaku-.

-Pues estoy seguro que no solamente has oído hablar de ellos, sino que hasta los has visto en acción-.

-Realmente no-asintió con la cabeza-.

-¡¿E- es en serio?!-preguntó sorprendido-, son conocidos en todo Ramadash

-Si, en serio, es que no soy de Ramadash-

-¿Entonces de dónde eres?-

-Bueno, en realidad soy de Ecleir…-respondió con inseguridad-.